martes, 27 de marzo de 2007

COMUNICADO no. 1 de las mujeres de Santa Catarina de Cuevas

AL PUEBLO DE MÉXICO.

A LOS PUEBLOS HERMANOS DEL MUNDO.

A LOS TRABAJADORES DEL CAMPO Y LA CIUDAD.

A LA PRENSA ALTERNATIVA

Nosotras somos campesinas, somos nietas, hijas y madres de campesinos. Nuestra comunidad se llama Santa Catarina de Cuevas, que también pertenece a México y al estado de Guanajuato. Cuando apenas nuestros abuelos y nuestros padres llegaron hace casi 80 años aquí a nuestras tierras, nos perseguían -según lo que cuentan nuestros abuelos- los que dicen que se llamaban “Cristeros”. Nuestros abuelos llegaron campesinos y lo único que querían era trabajar la tierra; pero ellos, “los Cristeros”, los perseguían a balazos siempre porque decían que las tierras eran de ellos… ante las balas, nosotros resistimos. Teníamos que escondernos, movernos de un lado a otro, pero regresamos siempre resistiendo. Desde aquel tiempo, aquí estamos, siendo nosotras y nosotros, campesinos y campesinas de Santa Catarina de Cuevas, Guanajuato, México.

Para nosotros no es causa de vergüenza ser campesinas y campesinos. También somos mexican@s, y sabemos que tenemos derecho, derechos que nos da nuestra constitución mexicana: el derecho al trabajo, a la vivienda, a que nos escuchen; tenemos derecho a que nos respeten nuestra manera de vivir.

Ahora, después de 80 años, aquellos a los que les llamaban nuestros abuelos “los Cristeros”, regresaron, con la misma finalidad que sus abuelos de ellos: con la intención de despojarnos de nuestras tierras. Ahora ponen sus patrullas a vigilarnos día y noche como si fuéramos delincuentes, llegan camionetas llenas y pasan violentamente por nuestras calles de tierra, donde juegan nuestros niños. Les decimos esto, y les contamos más:

Hace más de un año, a principios de 2006, el ex gobernador constitucional del estado de Guanajuato, Juan Carlos Romero Hicks, y –en ese entonces- el presidente municipal de la ciudad capital, Arnulfo Vázquez Nieto, utilizando las artimañas propias de la clase política con las cuales acostumbran engañar a los ciudadanos –y que en este caso nos tocó a nosotros–, pusieron en marcha un supuesto proyecto para construir una planta tratadora de aguas residuales que posteriormente, ahora pues, resulta ser la perforación de un pozo de aguas profundas, con el cual nosotras sabemos que nos veremos afectados todos aquí y otras comunidades más que están alrededor de la nuestra.

Así más o menos sucedieron las cosas después que los señores gobernantes vinieron aquí con nosotros para hacer dizque la planta tratadora, y que nunca fue:

-Lunes 22 de enero de 2007 inicia la perforación del pozo de unos 630 metros de profundidad –con una fuerte movilización policíaca–, teniendo un plazo de seis semanas para su conclusión

-Miércoles 14 de febrero de este mismo año se llevó a cabo una manifestación pacífica en las cercanías del lugar de la perforación, en su mayoría, el contingente estuvo integrado por mujeres y niños, habitantes de Santa Catarina de Cuevas.

-Sábado 17 de febrero: Una nota es publicada por el diario local A.M., donde se menciona la manifestación y cambiando los hechos sugiriendo que somos gente violenta y menospreciando nuestra causa.

-Lunes 26 de febrero: Visita del secretario de Desarrollo Agropecuario de Guanajuato Fernando Rodríguez, que de manera déspota y caciquil, nos ofrecía alternativas de producción agropecuaria como la creación de invernaderos y la crianza de ganado. A las mujeres nos propuso organizarnos para llevar a cabo otros proyectos productivos y, aunque daba por terminada el agua, nos ofrecía tractores que el gobierno nos “regalaba”.

Nosotras no queremos que las autoridades nos atiendan hasta el 2012, cuando las elecciones presidenciales o cosas como esas, cuando recuerdan pues su democracia; queremos ahora, exigimos ¡YA! que ese pozo a profundidad se detenga porque nos secaran nuestras norias y no vamos a tener con que regar nuestras tierras. Y es que nosotras sabemos que sin agua, la tierra muere, y con la tierra nuestra sin vida, nuestro futuro se vuelve más incierto. Y es que aquí sembramos higos, granadas, betabel, perejil, acelga, cilantro, trigo, maíz, fríjol y flores. Garbanzo, pepino, chile, calabaza, aguacate; todo se siembra por aquí. Al terminarse el agua no va a haber manera de sembrarlo, además la mayoría de la gente de eso vive. Al bajarse las aguas de los pozos nuestros campos se vuelven infértiles y entonces seguirán yéndose los muchachos a los Estados Unidos o a las ciudades a trabajar en sus fábricas, si somos jóvenes claro, o limosneros si somos viejos. O nos van a obligar, a falta de comida para la familia, a ser delincuentes por hambre.

Lo que sembramos en la comunidad también se consume aquí. Cuando siembran trigo, la gente de la comunidad lo utiliza para hacer tortillas, si necesitamos cilantro podemos pedirlo de quien lo tenga. Además la gente de los lugares de a lado que no tienen que comer, dicen: “vamos a Santa Catarina a ver que hay”. El agua de betabel, tradicional en la capital del estado, sale de nuestras parcelas, así como las flores que los revisten el viernes de Dolores.

Es por eso que hacemos el llamado a ustedes, pueblo de México, para que nos vean y sepan de nosotr@s (como no lo hacen el gobierno del estado de Guanajuato, comandado por Juan Manuel Oliva, y del municipio, comandado por Eduardo Romero Hicks –hermano de aquel gobernador que nos engaño-). Le pedimos su solidaridad hacia con nosotr@s, necesitamos que nos apoyen en este problema en que estamos, porque urge que esta perforación se detenga y nuestra comunidad sea escuchada y siga conservando su esencia: que los campesinos sigamos cultivando, y nuestros campos trasciendan las generaciones como hasta antes de que llegaran a interrumpir nuestras vidas. Nosotras sabemos que ustedes tienen muchos problemas, pero si pueden resistir con nosotras nuestra comunidad se los agradecería. Nosotras creemos que podemos mandar cartas para el señor que dice ser el Presidente de la Republica, Felipe Calderón; y al gobernador del Estado de Guanajuato Juan Manuel Oliva, y al presidente Municipal de Guanajuato Eduardo Romero Hicks, y a la secretaria de Agricultura, y a la Comisión Nacional del Agua, para que detengan esto de la perforación. Eso por un lado, por otro, y con todo el respeto, que si pueden, difundan nuestro problema por con sus gentes, y si es posible, que se muevan en sus lugares, y que cuando se muevan, nos tengan en sus mentes y les digan a los demás que esto esta sucediendo ahora acá, o allá, pero que puede sucedernos a todos.

Las mujeres de Santa Catarina de Cuevas, Guanajuato Gto., marzo de 2007.

cuevas.en.resistencia@gmail.com

3 comentarios:

sonrisas-furiosas dijo...

Saludos compañeras y compañeros, da gusto leer sobre otras resistencias y es muy chingón ver que las mujeres se organizan para alzar la voz. Ya tenemos su link y comunicado en nuestro blog (www.sonrisas-furiosas.blogspot.com). Vamos a estar al pendiente de sus noticias para difundirlas por acá.

Salud y Rebeldía.

Noemi Ortega dijo...

saludos desde León, me interesa saber más sobre ese problema, soy estudiante de la Universidad de Guanajuato de la Lic. en Desarrollo Regional y estoy haciendo una investigación sobre el municipio de Santa Catarina para un documental, espero que les pueda servir para exponer la problemática que tienen. Saludos y Buena ventura...!!

Anne Towgood dijo...

Felicidades Lucia y mujeres de Cuevas! Son un ejemplo admirable de lo que un pueblo puede hacer para conservar su dignidad, historia y derechos. A ver qué sigue con los planes del gobierno en nuestra región...no debemos bajar la guardia. Mil gracias.